Este libro es un regalazo de la editorial Pirámide. En otro momento hemos hablado ya del ciberbullying, pero en este caso traemos una obra que puede ser mucho más útil para los padres. Cuando se da una realidad tan dura en la infancia como son todas las variedades del acoso que pueden sufrir cualquier niña o niño. Es un libro asequible para cualquier persona, por su lenguaje y porque traducen muchas de las técnicas que utilizan de la psicología congitivo conductual. Inevitablemente, también recogen la evidencia científica generada por Dan Olweus.

Aspectos positivos…

El libro presenta de una manera mucho más sencilla y asequible que otros libros el concepto del bullying o acoso escolar y de las consecuencias psicológicas que tienen en los infantes. No pone ejemplos exagerados, ni ficticios, sino basados en la experiencia clínica. Es verdad que son muy duros de leer, pero también es necesario ver la realidad como es.

Presentan conceptos de autores muy famosos, como Albert Bandura o Aaron Beck, de manera traducida. Esto además de facilitar la comprensión de la lectura también puede dar claves importantes a las familias de cómo proceder con las víctimas o con los agresores.

No sólo la intervención es importante, sino que poder dar claves para la prevención de esta barbaridad a nivel familiar y escolar. Con estas herramientas se puede prevenir el suicidio infantil o simplemente que el paso por el colegio o instituto no sea una tortura.

Aspectos negativos…

Suele ser habitual que tanto en la intervención y en la prevención se pone bastante peso en el equipo docente. Sin embargo, hay que recordar que no son psicólogos y que su función principal es enseñar. Es evidente, que al ser las personas adultas que más tiempo pasan con ellas y ellos son elementos muy importantes, pero algunas veces es demasiado.

Hace una revisión sobre las variedades del acoso escolar y el laboral, pero al ser tan frugal, no se hace un análisis profundo sobre éstas. No se recoge el rol de «víctima/acosador», que es un perfil habitual y que requiere de una intervención distinta. Es verdad, que está dirigido a las familias y no tanto a profesionales, por lo que se entiende.

Hace mucho hincapié en los cambios cognitivos, pero no atiende a las experiencias infantiles que ha tenido la persona, sea víctima o agresor. Sería interesante poder atender a cuál es el estilo de apego, descubiertos por Mary Ainsworth, que tienen las personas que tienden a acosar a otras personas.

Valoración final…

Si eres un padre o una madre que teme que su hijo o su hija está sufriendo acoso o está en una situación problemática por culpa de las nuevas tecnologías, este libro puede ser un muy buen recurso para poder tomar ideas de cómo intervenir con él o ella, a qué aspectos atender, etc.

Puede ser un buen complemento a este libro el otro que reseñamos sobre psicología infantil, Ideas para padres en apuros de Joseph Knobel Freud. En éste se hace hincapié sobre cuáles son los aspectos a los que hay que atender para evitar que se les sobreproteja o se les atienda demasiado poco. Madres y padres suficientemente buenos, ¡nada más!

En definitiva, es un muy buen libro para tener una noción sobre la intervención en estos casos, ya que cuenta con investigaciones bastante actuales y un largo recorrido de trabajo clínico. Si en cambio, eres un familiar que crees que alguien de tu entorno puede estar sufriendo algún tipo de acoso, este libro posiblemente te ayude a poner algo de luz en el camino.

Lo puedes adquirir aquí, también en versión ebook. ¡Todo sea por tu comodidad!